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Caerás si lo sigues intentando. ¿De verdad deseas morir de esta manera?. Vamos tira la toalla. Lo sabes, esta esperando por ti. Piénsalo bien amigo. ¿Te importa tanto? ¿Realmente lo quieres?. Esa corona puedes conseguirla de otra manera. Porque arriesgarte. Lo sabes bien. Van a quebrar tus huesos y moler tu cuerpo. Cada segundo a partir de ahora, a cada momento. ¿Estas preparado para todo eso?. Porque delante tuyo hay un hombre que prefiere morir y llevarte consigo, que verte salir de este lugar con una victoria.
Mira la sangre que hay sobre la lona. Es tuya. En cada centímetro. Cada gota. ¿No crees que ya peleaste lo suficiente? No necesitas demostrarle a nadie lo que eres. No se trata de eso. ¿Entonces que carajos quieres? Mira tu cuerpo. Mírate hombre. Estas desecho. ¿Cuanto más crees que puedes soportarlo? Te han quebrado todos y cada uno de tus huesos. Ya ni siquiera hay aliento en tu cuerpo. Entonces aún no ha llegado el momento. Por todos los cielos ¿a donde quieres llegar con esto? Escúchame. Mírame. Se termino. It’s over men. Solo hay una manera de ganar este combate, y tú yo lo sabemos. Jamás podrás derribarlo.
Prefiero morir luchando, que nunca haberlo intentado. Pues prepárate. Porque es precisamente lo que te encontrarás si vuelves a ese ring. ¿Acaso no lo ves? Tienes la oportunidad de salir con honra de esta batalla. Coger tus cosas y regresar a casa. Ya no tenemos nada más que demostrar. Llegaste hasta este lugar. Y peleaste. Contra todos los pronósticos. Lo has hecho bien. Con orgullo y valentía. Pero es hora de retirarse. Seamos sinceros ¿a quien queremos engañar? ambos lo sabemos. Esta fuera de nuestro alcance. Del tuyo, no del mío. No insistas en esto. Retírate. Nunca alcanzarás ese trofeo. No lo has entendido compañero. Son otros tiempos, es otra la historia. La campana no ha sonado. Ya no importan las medallas, en nuestro corazón solo hay hambre de gloria.
En el fondo es algo que todos los seremos humanos queremos. Es la característica principal de los que buscaron la gloria. Hacer algo realmente grande. Formar parte de la historia. Algo que ponga nuestro nombre en la piedra y nunca jamás sea borrado.No ser nunca olvidados. Ser leyendas. Todo niño y toda niña lleva esos sueños de grandeza en el interior de su alma. De ahí las fantásticas y maravillosas aventuras que alguna vez son concebidas en nuestra cabeza. Sueños de gloria y grandeza. Tener la capacidad de volar hacia lo más alto, y poder tocar las estrellas con nuestras propias manos.
Sin embargo todos libramos esa lucha interna. Porque no es la conciencia, y tampoco nuestro corazón. Es la voz que escuchamos en nuestro interior. El traidor que reside en el castillo esperando el más mínimo síntoma de debilidad para abrir la puerta al enemigo. Negociando con nosotros. Poniéndonos contra las cuerdas. Intentando mostrarnos que se ha acabado el camino. Que ha llegado el tiempo darnos por vencidos. Sin embargo la campana no ha sonado todavía. Podemos luchar un round más. Hasta el final. Porque en cualquier pelea, el tipo que este dispuesto a morir, será quien ganará esa pelea. Será capaz de llevarse ese sueño. Y yo se que si algo de vida nos queda, es porque, aún estamos dispuesto a morir y luchar por ese sueño. Porque eso es lo que significa vivir. Una lucha feroz contra la complacencia. Una pelea constante por nunca abandonar nuestros sueños.
Uno. Dos. Tres. No falla ninguno. Cuatro. Cinco. Seis. Ahí va nuestra última costilla. Siete. Ocho. Nueve. Nos tiene contra las cuerdas. El arbitro interviene. Podemos escuchar los gritos de la gente. No hay claridad en nuestra mirada. La sangre estorba en nuestro ojo. Debemos alejarnos de las cuerdas. Entonces sucede. Su brazo se detiene. Esta cansado. El tiempo se acaba. No podemos fallar. Solo tenemos una oportunidad. Un solo tiro. Un solo golpe. Directo a la cabeza. Por primera vez en mucho tiempo, el gigante se tambalea. Siento los huesos de su cara crujir. Es ahora o nunca. Un paso atrás. Un golpe al frente. Nos toca. Y cae. La gente se levanta. La cuenta no para. Diez. Nuestros brazos se levantan. Lo hemos logrado. Esta noqueado.
 

 

Uno desiste en su lucha por ver realidad sus metas cuando se da cuenta que lo ha dado todo por intentar alcanzar su sueño. Cuando se ha puesto toda la carne en el azador, que uno se rinde hasta que siente que ya dio todo lo que podía dar, y ese momento mis amigos, sin temor a equivocarme, solo llega hasta el final de nuestras existencias, en nuestro lecho de muerte, con nuestro último aliento de vida. Luchemos. Por eso, pase lo que pase. No dejemos de intentarlo. Hasta el final. Un enorme abrazo. Se les quiere montones.
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pd. Hoy mi madre esta de cumpleaños. Así que no puedo marcharme sin dedicar unas palabras a la mujer que me cargo en su vientre, soportando mis patadas, y antojos por más de nueve meses. A quien con poniendo en riesgo su vida nos trajo a este mundo en medio del dolor y la alegría. Pero sobretodo a quien siempre a estado a nuestro lado cuando más lo hemos necesitado. No es porque sea mi madre, pero en mi vida he conocido una mujer tan maravillosa, con tanta fuerza de espíritu y cariño para seguir alentándonos a luchar por lo que siempre hemos querido. A mi madre, Ana Isabel Ríos Hernández, en su cumpleaños. Gracias por estar siempre a nuestro lado. Eres mi mayor orgullo. Te amo!
Cuando empezamos esta aventura, sabíamos que tarde o temprano este tiempo llegaría. Pero siendo sinceros, a pesar de muchas veces lo visualizamos, nada de lo que hayas hecho en la vida, te prepara para una despedida. Porque no importa el tiempo que haya transcurrido, ni cuantas veces lo hayamos ensayado frente al espejo. Nunca estás lo suficientemente preparado para decir adiós a algo que realmente amas con cada parte de tú corazón. Sin embargo. Es la ley de la vida. Por eso hoy, a pesar de todos los sentimientos que cargamos en nuestro cuerpo, miramos las fotos que cuelgan en la pared de esta oficina, y sabemos con certeza que ha llegado ese día. Que es el momento de decir adiós.
Siempre lo hemos creído. La vida es una sucesión de ciclos y de batallas. Una guerra continua por la conquista de los sueños que han sido forjados en el alma. Una pelea interna que se disputa día a día en la profundidades de nuestro corazón. Cual boceto en blanco donde con nuestras manos vamos dando forma en tonos y colores a esta hermosa obra de arte que algunos llamamos vida. Llena de canto en honor a la esperanza. Un proceso natural que sabemos como inicia, pero nunca como acaba. Una grandiosa historia que hace aproximadamente dos años y tres meses empezamos, y que hoy con recuerdos llenos de alegría y de nostalgia, reconocemos que hemos llegado al final de este camino.
Así es mis queridos amigos. Como lo anunciamos hace unos meses. Hoy Jueves 29 de Abril, cerramos oficialmente nuestro ciclo como Director de Proyectos de uno de los más grandiosos e increíbles ministerios que la vida nos dio la dicha y posibilidad de compartir. Sinceramente, no tengo palabras para expresar todas las emociones que nos embargan en este momento. Para nadie es un secreto. Desde que empezamos hace ya más de 10 años. HIMAD ha sido todo en nuestra vida. No solo nos tendieron la mano cuando más lo necesitamos, sino que también tuvieron la valentía para confiar en nosotros cuando nadie más lo hizo, y nos ha permitido llegar hasta donde estamos.
Porque fue en HIMAD, que a través de estos dos años de trabajo, que la vida nos ha abierto puertas hacia sueños y lugares que jamás imaginamos. Experiencias que marcaron nuestra vida para siempre. El honor de formar parte de proyectos que hicieron y seguirán haciendo historia tanto dentro y fuera de nuestras fronteras. Acontecimientos que dejaron huella y que sin duda nunca olvidaremos.

Sin embargo a todo lo bueno, le llega su final. HIMAD se renueva desde sus cimientos y una generación fresca de jóvenes se levanta detrás de nosotros. Sabemos que el cambio es necesario, el árbol viejo debe dar espacio para que los nuevo retoños crezcan con fuerza, por eso es que estamos seguros que ha llegado nuestro tiempo. Sin embargo nos vamos satisfechos, confiados y tranquilos de que la generación que queda, superará sin duda lo que hasta ahora hemos alcanzado.

Porque aunque la vida nos ha puesto en lugar de honor y privilegio, sabemos que no nos pertenece todo el merito. Porque a pesar de lo poco que hemos logrado en estos años, reconocemos desde el fondo de nuestro corazón que nada de lo que hemos alcanzado lo hemos hecho solos. En los momentos más difíciles tuvimos amigos y desconocidos que levantaron nuestros brazos nos motivaron a seguir adelante. Tantos que no nos alcanzarían mil artículos para escribir los nombres de las personas que nos han acompañado en este hermoso camino. Sin embargo quiero hacer el intento, y con este vídeo, rendirles homenaje a todos y cada uno de ellos.
Now that we’re here its so far away
And I feel like I can face the day
And I’m not ashamed to be
the person that I am today
Sinceramente amigos, nunca dejaré de darle gracias a Dios por la oportunidad de haberlos conocido. A Jon y Jennifer que me dieron la oportunidad de trabajar estos dos años a su lado, a Jonathan Salas que arriesgo a contratarnos, mil gracias por su confianza y cariño. A todos los amigos que en este tiempo he conocido en comisiones de trabajo, congresos y eventos, es cierto, nos vamos, pero no se preocupen, nos seguiremos viendo de vez en cuando. Jamás podremos olvidarlos. Estaremos siempre luchando a su lado.

Porque aunque hayamos llegado al final de este camino, no significa que ya hemos alcanzado la meta, ya que cuando se escala una montaña, en la cima, nos damos cuenta que aún hay otras que son más altas que la que acabamos de superar, por eso seguiremos siempre adelante, hasta el final. Porque no importa el teatro, y no importa el escenario, nada debe alejarnos de lo fue puesto en nuestro ser al momento de ser creados. Mis amigos, ustedes lo saben. Lo que esta delante y detrás de nosotros no se compara con lo que ha sido puesto en nuestro interior. Por eso pasamos la antorcha y seguimos adelante. Luchando. Con el alma y el corazón.

Dejamos un trabajo. Pero jamás abandonaremos este ministerio. HIMAD es parte de nuestras vidas. Hoy y siempre. Por las generaciones que vienen detrás de nosotros. Es nuestro lema. Dar nuestro mejor esfuerzo hasta el final. Cuando no exista carne en nuestros huesos y aliento en nuestro cuerpo. Pelearemos. Con honor y valentía, hasta el último segundo de gloria que sea escrito en nuestras vidas. Grandes cosas se deslumbran en el horizonte. Sigamos luchando. Sigamos creyendo. Pase lo que pase. No se rindan. El mundo es un buen lugar por el que vale la pena luchar. Nos seguiremos viendo de vez en cuando. Los quiero. Un enorme abrazo!

pd. Gracias amigos, por estar siempre a nuestro lado y seguirnos leyendo. Los quiero montones. Un enorme abrazo. Feliz fin de semana!


Actualización: A nuestros amigos del Blogswingers, pido disculpas por ausentarnos esta semana al octavo festival. Espero que puedan entender. Nos vemos en la próxima ocasión.
Caminar entre sus tierras es recorrer una galería de promesas sin cumplir. Gigantes de concreto que se levantan desafiantes, contra toda figura que exista en el firmamento, llenas de un falso orgullo que no engaña a quienes la visitan cada noche. Refugio y cueva de ladrones. Lugar de paso para viajeros sin rumbo y sin destino. Mercenarios que luchan a ciegas buscando desesperadamente la luz en su oscuro camino. Lo sabes. Puedes sentir su aroma en el aire. Esta impregnado en cada centímetro de sus mugrosas paredes. Has entrado en los dominios de lo inaudito y lo inconcebible. Reconoces el territorio. Estas en la ciudad de los sueños rotos.
No importa los años que tengamos de rondar en esta tierra. Todos hemos vez hemos dormido alguna vez en ella. Tierra seca y desierta. Panorama angustioso y desolador. Un lugar donde los amaneceres de verano son cortos y las noches de invierno eternas. Cada esquina es un cuadro de contrastes y sueños compartidos. Extrañas mezcolanzas de arena y miel. Esquinas llenas de incertidumbre, dudas y angustias. Jóvenes sentados en las aceras sin saber a donde ir. Esposos llenos de culpas en su interior. Padres que elevaron promesas al cielo, y nunca las pudieron cumplir. De eso están llenas sus calles. Alegría y dolor. Sentimientos que las lágrimas no logran llevarse. Un monumento permanente a la desolación, la fe y la esperanza.
La ciudad de los sueños rotos. Jóvenes y viejos. Todos la conocemos. Es el lugar de retiro en que ponemos nuestras insaciables ansias de victoria y de gloria. El viejo baúl al que destinamos nuestras recuerdos y memorias. El territorio en que son estampados todas nuestras esperanzas y más profundos sueños. Un lugar tan real como que tú y yo estamos vivos. Una tierra en la que todo aquel que entre, esta destinado a permanecer para siempre en el olvido. La ciudad donde los más grandiosos seres humanos han fracasado esperando la llegada de algo que nunca acontece.
«Mañana» es el nombre del tiquete que nos lleva a recorrer sus fronteras y limites. Mañana sacaré más tiempo para compartir con mis hijos. Mañana dejaré de tomar, comer o fumar. Mañana seré un mejor padre, esposo, o hijo. Mañana voy a comprar ese traje que siempre he querido. Mañana empiezo a hacer ejercicios. Lamentablemente. «Mañana» nunca llega y cientos de sueños quedan en el camino. Todos los años, cada vez que empieza un nuevo periodo lleno de oportunidades en nuestra vida, los seres humanos lanzamos estas promesas al aire. «Esta vez si voy a cuidar lo que tengo», «Ahora si prometo que voy a cambiar», «A partir de hoy, nunca más». Pero pasadas unas cuantas semanas, volvemos a la ciudad de los sueños rotos.
¿Que es lo que nos impide alcanzar nuestro destino? Falta de tiempo. Complicaciones personales. Problemas de salud. Los seres humanos somos expertos en hacer este tipo de listas. De hecho, no alcanzarían hojas para escribir las excusas. Pero todo se resume en eso. Excusas. Ni siquiera hemos empezado a intentarlo, cuando ya estamos reculando. «No puedo», «No nací para esto», «Que venga otro y lo haga». Buscar caminos alternativos. Tomar siempre la ruta más fácil. Y huir de la realidad. El talento y la habilidad son nada, sino contamos con fuerza de voluntad para luchar por lo que queremos de verdad.
¿A que se debe todo esto?. Cero depresión. Todo lo contrario. Hace unos días comentábamos sobre el deseo de las personas a ser recordadas. Esa pequeña llama que existe en nosotros de trascender más allá de la mortalidad. La forma en que vamos a ser recordados u olvidados por nuestros actos. Todos hemos pensado algún momento en ello. ¿Como quiero que me recuerden cuando pase a mejor vida?. Sin embargo si nos preguntan que estamos haciendo para llegar hasta eso, sin intención de juzgar a nadie, creo que muchos podemos decir que estamos haciendo poco o nada al respecto. Y es de esa manera que volvemos a la ciudad de los sueños rotos. Dejando promesas sin cumplir y caminos sin recorrer. Resignandonos a vivir en el mundo que nos fue dado, sin atrevernos a utilizar el poder que hay en nosotros para cambiarlo.
Es cierto. No es fácil. Nadie dijo que lo fuera. El mundo es un lugar rudo y salvaje, que esta a la espera de ser conquistado. Siempre he dicho quien no esta dispuesto a morir por lo que cree, no esta preparado a vivir por lo que quiere. Y es ahí donde se las dejo picando. ¿Realmente estamos luchando por lo que queremos? ¿Estamos dispuestos a morir por ello? ¿O son simples promesas que sabemos que nunca cumpliremos? Pero ante todo mis amigos, ¿Que estamos haciendo realmente para no volver a la ciudad de los sueños rotos?
Pd. Hola amigos! A pesar de que nos están saliendo las cosas de maravilla, estos días han sido de mucho trabajo, estamos en exámenes finales en la U, y con proyectos pendientes en la oficina, por lo que pido disculpas por estar un poco alejado de sus sitios. Esta semana esperamos volver al cauce con el blog. De paso les comento que Rincón de un escritor esta también ahora en Facebook. Donde estaremos retomando, aparte de los artículos diarios, nuestras categorías destacadas en el blog, además de secciones nuevas y en definitiva muchas sorpresas, por si quieren darnos seguimiento en nuestro acontecer diario con solo hacer click aquí. De antemano, mil gracias por su apoyo y comentarios. Un enorme abrazo. Feliz fin de semana!

Es una mañana clara. El sol comienza a visualizarse en el horizonte y las fuertes tormentas que alguna vez amenazaron nuestro paso, empiezan alejarse a nuestras espaldas. Las sombras y la arena son ahora pequeños detalles del pasado. Cada piedra que hemos encontrado en el camino, la estamos guardando para construir nuestro destino. Son señales que llenan de esperanza nuestro equipaje. Estamos cada vez más cerca del futuro que alguna vez soñamos. Es cierto, estamos cansados. Los problemas y las circustancias no se marcharan de nuestro lado. Sin embargo, en el fondo sabemos que si el viento golpea nuestra frente es que estamos avanzando. Que el camino esta siendo cruzado.
Ha sido un duro trayecto. Nadie puede negarlo. Hemos caminado a través del infierno. Noches oscuras de angustia y tormenta han acompañado cada tramo de nuestro camino. Nos hemos enfrentado a nuestros peores temores en sus maneras más deformes. Enemigos externos han atacado cada esquina del humilde campamento que levantamos noche tras noche. Luchas despiadadas, cara a cara, con nuestros más terribles demonios internos. Y hemos sobrevivido. Cada cicatriz que ha quedado a lo largo de nuestro cuerpo puede confirmarlo. Estamos vivos. Es cierto. Muchas noches pensamos que no podríamos lograrlo. Cuando las sombras cubrieron nuestro camino y amenazaron nuestro paso, levantamos la voz al cielo, gritamos en silencio y pensamos que jamás podríamos lograrlo. Más nunca lo creímos. Y hoy pienso que esa fue la clave.
Cada noche que miramos con mezclas de asombro y desconcierto las partes lastimadas de nuestra armadura. Señales de batalla y tortura se posan sobre ella, como poderosos tatuajes que muestran cada capítulo de esta increíble historia. Fueron motivación para seguir luchando. A veces nos cuesta creerlo. Pero es cierto. Hemos sobrevivido. ¿Como pudimos lograrlo? Jamás llegaremos a saberlo. Pero lo hemos hecho. Sin embargo, con humildad recordamos que no nos pertenece todo el merito. No lo hicimos solos. Valientes guerreros y hermosas doncellas han acompañado nuestro retorno de las sombras. Soldados y mercenarios han cuidado con su alma, nuestra espalda y nuestro camino. Gratas compañías que curaron cada una de nuestras heridas. Jamás podremos olvidarlo. Así como nunca podremos negar el nombre de quien puso el fuego en nuestro ser cuando las noches de invierno y tormento azotaron cada parte de nuestro cuerpo. Toda la gloria se la debemos a él. Gracias a Él estamos vivos. Gracias a ustedes amigos. Sobrevivimos.
A través del horizonte perseguí el luz
Espere con paciencia la llegada del sol
Y en ocasiones, cuando me quise rendir
Me envolviste en tus brazos amorosos
Y en tu amor me he rendido
Me amaste cuando era débil
Lo hiciste desinteresadamente
Y te convertiste en mi principal razón
Para luchar y sobrevivir
La vida no es fácil. A veces lo olvidamos. El mundo es un lugar lleno de tormentos y temor. Pero también de vida y de color. En nosotros esta la capacidad de poder caminar por cada trayecto del camino. De soportar los azotes y decirle a nuestro verdugo: Puedes matarme, pero jamás podrás quebrarme. Porque como dijo una vez Ernest Hemingway «El hombre no esta hecho para la derrota. Un hombre puede ser completamente destruido, pero jamás será derrotado». Por eso, pase lo que pase, no podemos rendirnos.
Fuimos diseñado para alcanzar la gloria. Para caer y levantarnos. Para luchar y soñar. Hasta el final. Porque hay un lugar no muy lejano, donde los ángeles tienen guitarras en lugar de alas. Un lugar lleno de esperanza, donde los acordes cobran vida, y los sueños, contra todos los pronósticos, tienen la capacidad de volverse realidad. Ese lugar es nuestro corazón, y esa hermosa melodía mis queridos amigos, es esta grandiosa aventura que llamamos vida. Nunca lo olvidemos. Somos los directores de este concierto. Disfrutemos a plenitud cada momento. Gracias a todos por su apoyo. Se les quiere montones.

En la vida hay golpes que intentan cambiar tu perspectiva. Situaciones a las que nos enfrentamos sin ningún aviso, sin ninguna clase de alerta. Momentos que en definitiva nos toman por sorpresa y nos dejan sin tiempo para desarrollar ningún tipo de estrategia. Dificultades que sacan a la vista nuestras peores pesadillas, los más oscuros y profundos temores que envuelven la seguridad y tranquilidad que hay de nuestras vidas. Circunstancias, que nos deja como barco a la deriva, sin saber que hacer, ni siquiera que pensar.
Son momentos en los que piensas que incluso el destino ha conspirado para sacarte del camino. Que no es para esto por lo que has nacido. Que todo lo que has creído, incluso vivido, no es más que un vulgar espejismo. Una especie de broma macabra y oscura que intenta hacerte creer que todo soñado, todo aquello por lo que has luchado, ha sido en vano. Momentos en la historia de nuestra vida que no hay más que espacios vacíos en el guión. «Interpretese esta escena a su gusto y manera» parecen ser las acotaciones del director ante nuestros problemas.
A los que nos han leído últimamente, saben que así nos hemos sentido en estos días. Atrapados. En búsqueda de una salida. No ha sido fácil. Muchas cosas han pasado por nuestra mente. Sin embargo nada que nos haya hecho perder la cabeza. Al final de cuentas, no son las palabras que escribimos las que marcan nuestro camino, sino nuestras acciones las que indican quienes somos realmente. Los problemas en la vida sirven de prueba de fuego para saber de que estamos hechos. Donde se encuentra fundamentada nuestra razón, y cuales son los principios que rigen cada gramo de fe y esperanza, que habita en nuestro corazón.
Ha sido un largo camino en nuestro retorno de las sombras. Muchas cosas han pasado por nuestra cabeza. Hemos caído. Y nos hemos levantado. Reído y llorado. Es parte de la vida. Gozar y sufrir. Sin embargo empezamos a ver luz al final del camino. Porque situaciones como estas, son las que nos recuerdan lo más importante de todo: Estamos vivos. Que no somos de palo, o de cemento. Hay pasión en nuestro cuerpo. Es ver como aunque tus sueños fueron quemados por el fuego, tus miedos son llevados por el viento. Son oportunidades de sacar la cara, señalar desafiante al mundo, y gritarle: Aún hay uno al que nos has vencido. De que pueden dispararnos, pero jamás podrán matarnos. Que nuestros sueños, pase lo que pase, nunca serán negociables. Que nuestra alma es ante todo, inquebrantable.
Así nos sentimos en este momento. La tormenta no se ha marchado del todo. Sus vientos y truenos, se encuentran ahora más que nunca haciendo muestras audibles de su poderío. La oscuridad sigue como bestia embravecida detrás de cada uno los pasos que damos. Sin embargo no han podido encontrarnos. Mientras sigamos camino y luchando, jamás podrá alcanzarnos. No hemos perdido la perspectiva. Sabemos de que estamos hechos. Las olas pueden hacer tambalear nuestra barca, pero jamás podrán derribarla. Pase lo que pase, mientras aliento en nuestro cuerpo y fuerza en nuestros huesos, vamos a pelear por ver realidad nuestros sueños.

Dificultades que forman carácter. Problemas que nos dan la posibilidad de seguir construyendo nuestro camino. Guiones inconclusos que despiertan la libertad y creatividad nuestros sentidos. Retos profundos para seguir buscando nuestro destino. Circunstancias que nos recuerdan que a pesar de todo, aún pertenecemos al reino de lo vivos, y debemos seguir luchando por lo que siempre hemos creído. El mundo es un buen lugar por el vale la pena luchar. Hoy más que nunca estamos convencidos de ello. Por eso seguiremos luchando. Hasta el final.

pd. No crean que lo hemos olvidado. Es una de las mayores alegrías que nos han dado. Gracias a todos por sus muestras de apoyo en estos días tan difíciles. Gracias por acompañarnos en este difícil camino. Se les quiere montones. Un enorme abrazo!

Actualización: Estamos en Cuartos de Final en el Torneo de Poesía «La Dama de Cristal». Nuestro personaje, el Caballero de Sen-Heir sigue dando muestras de su valor y coraje. Para quienes quieran leer nuestra participaciones y saber más sobre el tema, hacer click aquí.
Sombras y arena son la antesala de nuestro destino. Un huerto de árboles retorcidos, que parecen elevarse hasta las profundidades del cielo nocturno, son los únicos testigos que observan nuestro paso por este oscuro sendero, camino traicionero, que tiene en sus manos la capacidad de darnos la salida, o encerrarnos para siempre en este agonizante y aterrador desierto. Es el chance que nos jugamos caminando en la delgada línea que divide la felicidad de la locura. Es la manera real de salir de este infierno. Renunciar a todo aquello que queremos y centrarnos en lo que realmente creemos. La única opción para retornar al lugar que por derecho pertenecemos. Encarar nuestro destino sin dudas y sin miedos.
Las hojas se mueven entre las sombras, como si se encontrasen seducidas por algún tipo de fuerza extraña que obedece a los mandatos del fuego y el viento. A lo lejos, una escuadra de nubes grises se ciñe sobre el terciopelo oscuro que acapara las inmensidades del cielo nocturno. Truenos y tambores contienen con furia cada palabra que compone nuestro nombre. El aire es espeso. Nos nos cuesta contener el aliento. Pero en este lugar, no hay tiempo para preocuparse en ello. La ardiente brisa golpea con violencia nuestro rostro. Fuertes tormentas acechan nuestras espaldas. No podemos detenernos. Es nuestro destino. Seguir avanzando. Al final de cuentas, es un largo camino el que nos llevará de regreso hasta el cielo del que hemos caído…

pd. A los amigos que nos han seguido en este duro proceso. Gracias por su apoyo. A lo lejos, en medio de la oscuridad y la muchedumbre, sus voces y palabras de aliento han sido para nuestra vida una gran fortaleza. Seguimos adelante. No podemos detenernos. La vida continua. Los quiero montones. Un abrazo!

Para los amigos que no entendieron este post, los invito a visitar en orden los siguientes textos:

Hay cosas que uno desearía que nunca tener que escribir. Incluso que nunca hubiesen pasado. Como si todo se tratase de un mal sueño, deseas despertar lo más pronto que puedas. Pero no es posible. Por más que lo quieras. Entonces en el fondo entiendes que así es la cruda realidad. De repente, sin pensarlo, sin siquiera imaginarlo, el mundo se derrumba ante tus ojos. Todo lo que una vez creíste, viviste e incluso soñaste, se cae en pedazos ante tu mirada y por más que quieras, porque más que desees intentar hacer algo, entiendes que ya no puedes hacer nada para evitarlo.
Sin escalas. Como un hombre que salta de un avión sin paracaídas, la angustia y la agonía carcomen tu cuerpo, a sabiendas que nada te separa entre el oscuro cielo y el frío suelo. Escalofríos recorren tu cuerpo y todo lo que has vivido pasa frente tus ojos. No sabes diferenciar entre lo real y lo aparente, y las dudas invaden cada espacio de tu mente. Duele. Es lo único que sabes de verdad. Duele tanto que deseas con toda tu alma que alguien acabe con tu tormento de una vez y por todas. De la forma en que sea. Porque por más que lo intentes, no puedes ocultarlo. Si alguien te diera la oportunidad de arrancarte el corazón y tener la capacidad de seguir viviendo, lo harías sin pensarlo.
Cualquier cosa que pueda calmar el dolor, suplica sin respuesta el corazón. Nadie escucha sus gritos desesperados. Es imposible hacerlo. Un abismo eterno, separa lo que esta vivo de lo muerto. Pues tan solo en un momento, todos tus sueños se queman al instante, y de repente, chocas contra la cruda verdad. No te puedes engañar. Es real. No se trata de un burdo sueño. Has pasado del cielo, al infierno.

Y una vez ahí. Reventado. Contra el piso. Lo entiendes. Es claro como el agua. Tienes que escalar el abismo. He intentarlo de nuevo. Hasta que aprendas a volar. Libre. Como el viento.


pd. Gracias por estar siempre a nuestro lado. Un abrazo. Los quiero montones…
No sé como lo haces. Pero tienes el encanto necesario para hacerlo realidad. Día con día. Sin proponertelo, sin pensarlo, te has convertido en el más hermoso y maravilloso de los regalos. Porque no importan los días que pasen, los situaciones que nos acorralen. Tu sigues siendo el arroyo que llena de luz y vida cada centímetro de mi cuerpo. La hermosa estrella que alumbra mis noches más oscuras. La enorme distancia que existe entre la palabra querer y hecho real de saber lo que es amar.
Porque es a tu lado que he descubierto el significado de la palabra te amo. Cuando la lluvia ha caído sobre mi cuerpo, y mi corazón pierde la cabeza, siempre estas junto a mi para corregir mi camino, y llevarme nuevamente hasta tu lado. Y eso es lo más maravilloso que hay en ti. Fuiste mis ojos cuando no pude ver. Mis labios cuando me fue imposible respirar. La diferencia entre la pasión incontrolable, y el más frío y terrible de los inviernos.
Miles de hombres a través de toda la historia, han muerto con la esperanza de sentir una pequeña parte del amor que me entregas día con día. Porque a pesar de los problemas, los desiertos y las tormentas. Nunca me has abandonado. Porque aún sin merecerlo. Siempre has permanecido a mi lado. ¿Como lo hiciste? No tengo la menor idea. Pero sea lo que sea que este haciendo para mantenerme a tu lado, nunca dejes de hacerlo, porque cada vez que te veo, siento un fuego en mis adentros, que despierta sin pensarlo, consumiendo todos los miedos que hay en mi cuerpo, refugiandose, como un niño, tiernamente en tu mirada, deseando con el alma nunca ser separada hasta que pase la tormenta y amanezca tranquila en los brazos de la persona amada.

Y así te fui queriendo a diario,
sin una ley, sin un horario,
y así me fuiste despertando,
de cada sueño, donde estabas tú.

Y nadie lo buscaba,
y nadie lo planeo así,
en el destino estaba,
que fueras para mi.

Como olvidarlo. Un día como hoy. Lo pregunte de rodillas. Estaba nervioso. No encontraba las palabras para expresarlo, sin embargo, mi corazón quería gritarlo. Ya no podía ocultarlo. «¿Quieres ser mi novia?». Tuve miedo. Me miraste incrédula. Los segundos se hicieron eternos. Temí lo peor. Y entonces sucedió. Mi corazón se detuvo y el mundo se puso de cabeza. Jamás podré olvidarlo. Sin planearlo. Sin pensarlo. Dijiste que si. Y desde ese día, me convertiste en el hombre más feliz…
La muerte. Todos le tenemos. Todos llegamos a ello. No importa cuanto intentemos retrasar su llegada con medicinas, ciencia y tecnología, a todos y cada uno de nosotros, tarde o temprano, nos va a llegar nuestra hora. ¿Entonces porque tanto cine misterio alrededor de ello? Si todos sabemos que algún día nos llegará nuestra muerte, entonces ¿porque le tememos tanto?
No podemos negar la realidad. Del polvo venimos y al polvo tendremos que regresar. Lo hemos escuchado hasta la saciedad. Cada paso que damos en esta vida es un instante hacia la muerte. Desde fuimos concebidos, nuestro cuerpo, como un viejo reloj de arenas que comienza su cuenta regresiva, hacia nuestra partida eterna. Tan segura esta la muerte de su victoria, que nos ha dado toda la vida como ventaja. Si es así, ¿cual es la razón de que nos aterra el tener que encontrarnos con ella?
Y no es que este diciendo que debemos perderle respeto a la vida, sino por el contrario, nuestra existencia es un hermoso regalo que debemos aprovechar al máximo antes de que sea demasiado tarde. No se trata de vivir una vida de hedonismo y libertinaje, sino más bien saber disfrutar los pequeños detalles que nos rodean. Muchas veces esperamos hasta el ultimo momento de nuestra vida para decir las cosas que sentimos, o hacer aquellas que siempre hemos soñado. ¿Para que esperar tanto? La vida es como pequeña llama encendida en medio de la tormenta, en cualquier momento puede apagarse para siempre. Entonces, ¿para que despilfarrarla vilmente sin sentido ni propósito?
El propósito de nuestra vida. Esa pregunta que nos acecha desde que tenemos memoria ¿Para que estoy aquí? ¿Porque nací? Desde el hombre más humilde, hasta el lord más ilustrado, todo ser humano se ha hecho esa pregunta. Pocos han encontrado la respuesta. No es fácil hacerlo. Es un viaje de auto descubrimiento en compañía de nuestro creador hacia el interior de nuestra alma. Yo aún estoy en eso. Muchas veces me hago la pregunta, para ser sincero. Como un pequeño rompecabezas, poco a poco vamos encontrando las respuestas, y construyendo nuestro propio destino. Es lo que creo. Así se lo comente a mi amigo Enock Salazar que tuvo la cortesía de visitarnos en estos días, y con un par de preguntas que me hizo, dio luz y vida a este tema:
¿Como quieres que la gente te recuerde? ¿Que te gustaría que pusieran en tu tumba? Yo conteste sin dudar: Como alguien que lucho hasta el final. Alguien a quien no le importo darlo todo por ver cumplido sus sueños. Como le mencionado miles de veces. Aquel que tiene voluntad moldea el mundo a su gusto. No somos marionetas del mundo ni de nadie, en lo personal combatir por mis sueños es la unica cosa que he hecho bien en mi vida, posiblemente porque siempre he luchado por aquello en lo que creía. Quien no esta dispuesto a morir por sus sueños, no esta preparado para obtenerlos.
Quizás por eso me gusto tanto la frase que vi hace unos años en la película Kun Fu Panda -y decían que era solo para chamacos- «El ayer es historia, el mañana es un misterio, el hoy es un regalo, por eso le llaman presente». La vida es demasiado corta como para gastarla en nosotros mismos. Vale la pena invertir en alguien. Porque como lo dije una vez, si con una sola palabra podemos llevar aliento y esperanza al más necesitado, nuestra vida no habrá sido en vano. Por eso, lo importante es que elijas tu propia vida y luego vivas.
Y he ahí la cuestión de este día. Y ustedes mis queridos amigos.
¿Como quieren que la gente los recuerden?

pd. Gracias amigos por sus comentarios y apoyo en cuanto a nuestra operación. Disculpen el abandono. Han sido días complicados. Gracias a Dios, ya reparamos nuestra computadora y pusimos internet en la casa, así que esta semana nos será mucho más fácil visitarlos y leerlos de cerca. Un abrazo. Feliz semana.
No las hemos olvidado. Pueden haber pasado los días pero las fechas siguen presentes en nuestra memoria. Han sido tiempos complicados pero nada puede evitar que rindamos homenaje a la obra cumbre con que Dios puso broche de oro a la creación. Porque señoras y señoras, permitanme decirlo de la manera más clara posible: ¡Al carajo las teorías evolutivas! Quien contempla la belleza de una mujer, tiene que reconocer que solo un Ser Supremo pudo haber creado algo tan hermoso y maravilloso como lo es la mujer.
Madre. Novia. Esposa. Princesa. Reina. Compañera. Amante. Amiga. Todo en un mismo ser. ¿Existe acaso algo más maravilloso?. Los hombres somos toscos, rudos, sencillos, sinceros. No es por menospreciar nuestro genero. Tenemos lo nuestro. No es a cualquier miembro de la creación «Tú eres mi misma imagen, el icono de mi semejanza». La firma de nuestro creador se halla en nuestro corazón violento, salvaje y apasionado. Sin embargo con Eva, Dios se lleva las palmas. Porque llamenlo como quieran. La cereza en el pastel. El broche de oro. La nota final de una obra maestra. La mujer es la corona reluciente de la creación. Y a ella es a quien hoy humildemente rindo homenaje.
Porque digan lo que digan. La mujer es lo más hermoso que Dios pudo haber creado. No hay duda de eso. La forma en que engalanan nuestro mundo es un regalo de aquel que nos dio la vida. Por eso, como siempre lo hemos hecho, hoy rendimos homenaje a esta gran obra que es la mujer. A mi madre, a mi abuela, a mis amigas y compañeras. Ustedes son el regalo perfecto de Dios. Son lo mejor que nos ha pasado. El mundo no sería igual sin ustedes. De corazón: gracias por cada momento maravilloso que nos han regalado. Por ser fuente de inspiración, pero sobre todo, gracias por existir.
Y no crean que se van a ir este día con las manos vacías. Para ustedes tenemos un premio (cortesía de nuestra buena amiga Keniposa, del blog Mi 1ra vez) dedicado a todas nuestras amigas, escritoras y lectoras que nos acompañan día con día y que entregamos para que puedan guardar o lucir en su blog. ¿Porque? Porque ustedes merecen lo mejor. Atrasado. Pero puntual. Feliz día internacional de la mujer!!

Rumbo al Quirófano. Si se preguntaban porque nuestra ausencia y atraso para escribir este texto. Esa es la razón. La semana pasada, en esas cosas interesantes y divertidas de la vida, nos dimos cuenta que tenemos un pequeño agujerito en la parte inferior de la espalda. Fuimos al medico y el diagnostico fue inmediato. Una pequeña lesión entre el hueso sacro y el coccix, que va a necesitar cirugía de manera urgente. Así que por esa razón nos hemos pasado los últimos días entre clínicas y hospitales. La buena noticia es que no va a matarnos, ni tampoco afectar nuestras labores diarias mientras esperamos ser operados.

La mala es que el seguro social nacional (entiéndase CCSS para los amigos que nos leen en el extranjero) tiene uno de los sistemas de cirugía más complicados del mundo, y aunque en buena teoría ya estoy internado, tengo que esperar una cama disponible para ser operado, lo que según el especialista que me va a intervenir, puede tardar (en el mejor de los casos) de seis meses a tres años. Y ya que una clínica privada es demasiado cara para nuestro presupuesto, no nos quedara otra opción que esperar pacientemente.

Y aunque en un principio nos preocupo bastante, la verdad es que hoy estamos muy tranquilos. Este tipo de acontecimientos solo sirven para demostrar en que base hemos fundamentado nuestra fe. Saber de que estamos hechos. Y recordar que la vida es una llama que en cualquier momento puede apagarse, por lo cual debemos disfrutarla todo lo que podamos, cuanto antes. Por eso seguimos adelante. Hasta el final. Ya lo dije una vez. Las piedras que nos encontramos en el camino, las utilizamos para construir un fuerte castillo.
Tenemos grandes sueños y proyectos. Seguimos creciendo. Por eso de paso aprovecho para contarles que gracias a Natalia Obando la próxima semana estaremos en la radio. Se trata de un espacio matutino llamado «Arriba con la U» en la frecuencia nacional 101.9 FM (Radio UCR) que busca nuevos talentos en diversas áreas. Estaremos toda la semana en el segmento de las 6:30 de la mañana, con algunas secciones de nuestro blog, por si quieren darse la vuelta y acompañarnos en nuestros debut radiofónico, que por aquello de las dudas, será solamente esa semana.

En memoria de las victimas del atentado ocurrido el 11 de Marzo del 2004. Como muestra de respeto con los familiares, y en honor al coraje y servicio de los que acudieron en su socorro. En solidaridad con todos nuestros hermanos y lectores españoles. Rincón de un escritor guarda un día de silencio, porque seis años después. No os olvidamos…

pd. Gracias amigos por su apoyo en estos días en el texto de nuestra compañera, pero sobre todo por sus muestras de afecto a pesar de nuestra ausencia. Es un privilegio tenerlo a nuestro lado. Un enorme abrazo. Feliz semana!!